MASAJE BALINÉS

El masaje balinés, es una ancestral terapia para la curación propia de la isla de Bali (Indonesia), una de las 17.508 islas que componen la República de Indonesia, una nación ubicada en el sudeste de Asia y del mundo, el estado más grande del archipiélago. Durante varios miles de años, los barcos mercantes se desplazaban a través de las conocidas como "islas de las especias" (la Indonesia de hoy en día) procedentes de países como la India y China. En ese continuo trasiego e intercambio comercial y cultural, los hindúes aportaron sus conocimientos sobre el masaje, las hierbas medicinales, los aceites medicados y la medicina ayurvédica, mientras que desde China arribaron todas las técnicas de acupresión y conocimientos propios de la Medicina Tradicional China. 

Bali es la única isla en la que aún se conservan intactas las raíces y tradiciones budistas e hindúes. Son unas tierras cargadas de tradiciones y a las que sus gentes se hallan ligadas de una manera tan íntima y especial. La palabra masaje es sinónimo de medicina; las gentes de Bali cuentan con su propio sistema de medicina tradicional, el Jamu, incluyendo el masaje como una de las técnicas curativas a aplicar. Debemos de tener muy en cuenta, que Jamu es a Bali -y a Indonesia- como Ayurveda lo es a La India. 

Muchas de las otras islas de Indonesia adoptaron sus propias técnicas de masaje que son similares a los masajes balineses en su esfuerzo por sanar el cuerpo físico y la mente espiritual, pero también son distintos y tienen sus propias características. Algunos de ellos son: Sasak, Lombok, Urat, Boreh (se utiliza una pasta de especias molidas para aliviar el dolor, esta técnica de masaje fue concebida por los agricultores locales de arroz), Javenese Lulur Ritual (habitualmente se ejecuta para las novias durante la preparación de su boda).

El masaje clásico balinés se basa en el profundo impacto de unas manos dotadas, sabias y dedicadas para realizar amasamientos de la piel, elongaciones, fricciones, estiramientos, reflexoterapia, acupresión, y elementos de yoga, para relajar los músculos y estimular todo el cuerpo, con el fin de alcanzar un estado de armonía completa entre mente, espíritu y físico. El terapeuta, a través de movimientos suaves, acompasados y profundos, “baila con sus manos” sobre el cuerpo del paciente, para liberarle por completo de tensiones. 

El masaje balinés puede ayudar en el tratamiento de una amplia gama de malestares tales como migrañas, dolores musculares y articulares, trastornos del sueño, situaciones de estrés, estados de ansiedad o depresión, tratamiento de las alergias y dificultades respiratorias como el asma… y en referencia a zonas concretas, se le conocen las siguientes propiedades:

-En la espalda: elimina todas las tensiones y sobrecargas.

–En pecho y abdomen: favorece el ritmo cardíaco y abre los canales energéticos.

–En los brazos: relaja toda la musculatura, desde los hombros hasta la punta de los dedos de las manos, haciendo hincapié en las zonas más afectadas.

-En pies y piernas: drena, favorece la circulación y la movilidad.